Niños de El Salvador

Descubriendo los derechos infantiles en El Salvador

El Salvador es un país complejo, invadido por la violencia de las bandas que tiene un fuerte impacto en los niños del país y sus derechos fundamentales. Ello acentúa todavía más las desigualdades existentes en el país. Sin embargo, el país ha progresado notablemente en términos de legislación, calidad de vida y de servicios públicos, lo que ha dado lugar a una disminución en la tasa de mortalidad infantil (Comité de los Derechos del Niño, 2018, p. 1).

Cabe señalar que los desafíos a la hora de recopilar datos dificultan el seguimiento de la aplicación y el cumplimiento de los derechos de los niños, y esto es contrario a la Observación General nº 5 de 2003 del Comité de los Derechos del Niño (Comité de los Derechos del Niño, 2018, p. 3). 

Índice de los Derechos del Niño: 7,41 / 10
Nivel rojo: Situación difícil

Población : 6,4 millones
Pob. de 0 à 14 años : 27 %

Esperanza de vida: 75 años
Mortalidad en menores de 5 años: 22

El Salvador de un vistazo

El Salvador es el país más pequeño de América Central pero también el más densamente poblado, especialmente en la capital (CIA s.d). A pesar de ser la cuarta economía de Centroamérica, el índice de pobreza es muy alto. Ello va de la mano de una importante disfunción estructural, donde destacan la corrupción (Comité de los Derechos del Niño, 2018, p. 2) y la violencia.

Debido a las actividades de las bandas que controlan territorios enteros, el país tiene una de las tasas de homicidio más altas del mundo (CIA, s.d.). Estos grupos extorsionan a los residentes, cuando no están reclutando por la fuerza o abusando sexualmente de los niños. Según Human Rights Watch, «las bandas matan, hacen desaparecer, violan o desplazan a quienes se resisten». Esto tiene un fuerte impacto en el respeto de los derechos de los niños (Human Rights Watch, s.d.).

La situación de los derechos del niño [1]

A nivel internacional, El Salvador ha ratificado varios instrumentos fundamentales sobre los derechos del niño, entre ellos

El Comité de los Derechos del Niño ha instado al país a seguir ratificando convenios para reforzar el sistema de protección de los derechos del niño, como la Convención Internacional para la Protección de Todas las Personas contra las Desapariciones Forzadas de 2006 y el Protocolo Facultativo de la Convención contra la Tortura y Otros Tratos o Penas Crueles, Inhumanos o Degradantes de 2002 (Comité de los Derechos del Niño, 2018, p. 3). De hecho, el Informe del Grupo de Trabajo sobre el Examen Periódico Universal señala lo mismo en su informe de 2020 (Consejo de Derechos Humanos, 2020, p. 10). 

A nivel nacional, El Salvador ha puesto en marcha varias medidas para aplicar mejor la Convención, entre ellas:

  • La Ley General de la Juventud aprobada en 2012.
  • La Política Nacional de Protección Integral de la Niñez y la Adolescencia (2013-2023), el plan «El Salvador Educado» (2016-2026).
  • La modificación del Código Civil para acabar con el matrimonio infantil. 
  • La reestructuración del Instituto Salvadoreño para el Desarrollo Integral de la Niñez y la Adolescencia y del Consejo Nacional de la Niñez y la Adolescencia.
  • La realización de campañas de comunicación para la prevención del maltrato infantil y la violencia sexual.
  • La modificación en 2017 de la Ley de Protección de la Infancia y la Adolescencia, que ahora prohíbe todas las formas de violencia contra niños y adolescentes en todo tipo de instituciones educativas (Comité de los Derechos del Niño, 2018, p. 1 / Consejo de Derechos Humanos, 2020, pp. 2-3). 

Sin embargo, para que estas medidas surtan pleno efecto, es necesario que El Salvador pueda proporcionar suficientes recursos financieros, humanos y técnicos. Esto no siempre es así como debería ser para la Política Nacional de Protección Integral de la Niñez y la Adolescencia (2013-2023) (Comité de los Derechos del Niño, 2018, p. 2).

Abordar las necesidades de los niños

Derecho a la educación

La falta de recursos también afecta a sectores enteros relacionados con la aplicación de los derechos de los niños, incluido el derecho a la educación. El sistema educativo tiene una grave falta de financiación. Con sólo el 3,2% del producto interior bruto dedicado en 2018, no se cumplen los niveles mínimos de inversión internacionalmente aceptados (Comité de los Derechos del Niño, 2018, p. 2).

Esta falta de financiación afecta a la calidad de las infraestructuras escolares: muchas escuelas carecen de acceso a agua, electricidad e instalaciones sanitarias. El acceso a instalaciones como bibliotecas, ordenadores e Internet, que son recursos habituales en muchas escuelas del hemisferio norte, ni siquiera se tiene en cuenta, mientras que hay una grave escasez de personal docente. El acceso a la propia escuela es difícil con la inseguridad en muchas zonas debido a la actividad de las bandas (Comité de los Derechos del Niño, 2018, p. 12).

Todos estos factores contribuyen al abandono escolar, que es una auténtica lacra en El Salvador, especialmente durante la educación secundaria (Comité de los Derechos del Niño, 2018, p. 12). El Comité de los Derechos del Niño destaca dos categorías de menores: las madres adolescentes y los niños migrantes o desplazados internos. Por ejemplo, no se toman medidas para apoyar el regreso de las madres adolescentes después del parto (Comité de los Derechos del Niño, 2018, p. 12).

Como punto positivo, El Salvador ha emprendido un programa nacional de alfabetización, que ha sido elogiado por la comunidad internacional. Además, todos los alumnos de las escuelas públicas han recibido material escolar y algunas escuelas tienen ahora un comedor (Consejo de Derechos Humanos, 2020, p. 11). Derecho a la vida

El derecho a la vida, la supervivencia y el desarrollo está incluido en la Convención sobre los Derechos del Niño, pero también es uno de los principios rectores de ese tratado. Esto significa, entre otras cosas, que el niño tiene «derecho a ser protegido contra actos y omisiones que tengan por objeto o resultado causar una muerte no natural o prematura» (Comité de los Derechos del Niño, 2017, p. 12). Actualmente, este derecho no se respeta en este país. La tasa de homicidios es muy alta y afecta especialmente a los niños. En 7 años, se han registrado más de 4.000 muertes. 

Sin embargo, como se mencionó anteriormente, esta situación también va acompañada de una grave falta de información accesible sobre las investigaciones y los enjuiciamientos (Comité de los Derechos del Niño, 2018, p. 4). Las armas son una auténtica lacra en este país.  El gobierno toma pocas medidas para supervisar la disponibilidad y la facilidad de acceso para abordar esto (Comité de los Derechos del Niño, 2018, p. 4). 

Derecho a la salud

Un derecho relacionado es el derecho a la salud, que no se garantiza a los niños salvadoreños. Al igual que el sector de la educación, el sector de la salud sufre de asignaciones presupuestarias insuficientes (Comité de los Derechos del Niño, 2018, p. 2). Por ejemplo, la adicción al alcohol, al tabaco y a las drogas es un verdadero reto para la salud pública y afecta especialmente a los jóvenes menores de edad. Proporcionar recursos para crear centros de salud para adictos y campañas de sensibilización es crucial en este país (Comité de los Derechos del Niño, 2018, p. 10).

El Comité de los Derechos del Niño se ha interesado especialmente por el caso de las adolescentes embarazadas, entre otras cosas por la recurrencia de estas situaciones (Comité de los Derechos del Niño, 2018, p. 2) y por la extrema violencia asociada a ellas. De hecho, «un tercio de todos los embarazos afectan a niñas de entre 10 y 18 años y […] un elevado número de niñas se quedan embarazadas como resultado de una violación o de un abuso sexual de menores» (Comité de los Derechos del Niño, 2018, p. 9).

En general, el acceso a los anticonceptivos y a los servicios de salud sexual es muy limitado para los adolescentes (Comité de los Derechos del Niño, 2018, p. 9), pero la difícil situación de las madres adolescentes va más allá. La principal causa de muerte en esta población es el suicidio. No es posible abortar, aunque el embarazo sea fruto de una violación o un incesto, si la vida de la madre está en peligro o si el feto no es viable.

Este tipo de prohibición conduce a prácticas peligrosas. Sin embargo, El Salvador es muy consciente de esta situación y ha puesto en marcha una estrategia nacional intersectorial para la prevención del embarazo adolescente de 2017 a 2027, así como programas de sensibilización (Comité de los Derechos del Niño, 2018, p. 10).

Derecho a la protección

La violencia es un hecho cotidiano para los niños de El Salvador. El castigo corporal forma parte de las costumbres del país (Comité de los Derechos del Niño, 2018, p. 7). La Ley de Protección de la Infancia y la Adolescencia prohíbe ahora todas las formas de violencia contra niños y adolescentes en todo tipo de instituciones educativas (Comité de los Derechos del Niño, 2018, p. 1 / Consejo de Derechos Humanos, 2020, pp. 2-3).

Sin embargo, en el hogar siguen siendo frecuentes los casos de violencia con fines educativos, lo que es contrario a la Observación General nº 8 de 2006 sobre el derecho del niño a la protección contra los castigos corporales y otras formas de castigo crueles o degradantes (Comité de los Derechos del Niño, 2007). El Comité de los Derechos del Niño ya ha destacado esta situación en recomendaciones anteriores. El Salvador debe prohibir este tipo de castigos, pero sobre todo debe esforzarse más para promover la educación positiva (Comité de los Derechos del Niño, 2018, p. 7).  

Al mismo tiempo, muchos casos de abuso y negligencia se ponen en conocimiento de las instituciones del país. Entre 2012 y 2015, se denunciaron ante las comisiones de protección casi 46.000 casos de maltrato y abandono que afectaron a 52.065 niños. En 2016 se presentaron más de 13.000 casos ante el Consejo Nacional de la Infancia y la Adolescencia.

Cabe señalar que hay pocos datos sobre el impacto de estos informes (Comité de los Derechos del Niño, 2018, p. 7). Además, cuando los niños son internados en instituciones, siguen recibiendo abusos, lo que ya fue una cuestión planteada por el Comité de los Derechos del Niño (Comité de los Derechos del Niño, 2018, p. 8).

Factores de riesgo → Retos específicos del país 

Violencia

Como se ha mencionado anteriormente, la violencia forma parte de la vida cotidiana de los jóvenes salvadoreños. Las pandillas juveniles, o maras, gobiernan muchos barrios. Los jóvenes, tanto niñas como niños, son reclutados a partir de los 12 años (Comité de los Derechos del Niño, 2018, pp. 5-6) y sufren abusos sexuales (Human Rights Watch, s.f.). El Salvador ha adoptado el plan «El Salvador Seguro» para hacer frente a la situación, pero hay que hacer mucho más (Comité de los Derechos del Niño, 2018, pp. 5-6), entre otras cosas porque faltan recursos financieros, técnicos y humanos (Comité de los Derechos del Niño, 2018, p. 6). 

El índice de asesinatos y desapariciones de niños sigue siendo muy alto, sobre todo a causa de las maras. El clima de inseguridad tiene un fuerte impacto en la salud mental y el bienestar de los niños (Hernández, 2018). La impunidad de los delitos cometidos por estas bandas dificulta el tratamiento de esta situación y se presta poca atención a la hora de abordar las causas estructurales de la violencia (Comité de los Derechos del Niño, 2018, pp. 5-6).

Sin embargo, la violencia es una de las principales causas de desplazamiento interno (Comité de los Derechos del Niño, 2018, p. 6). Esto se ve reforzado por «las persistentes denuncias de tortura, ejecuciones extrajudiciales y desapariciones forzadas de niños a manos de la policía y las fuerzas armadas, especialmente en el contexto de la lucha contra el crimen organizado» (Comité de los Derechos del Niño, 2018, p. 6).  

Es importante tener en cuenta que, más allá de crear un clima de inseguridad, esta violencia repercute en la realización y protección de los derechos de los niños. Por ejemplo, muchas escuelas están situadas en territorios controlados por las maras o en zonas donde el tráfico de drogas y de armas está especialmente presente. Se han denunciado casos de violencia sexual y tráfico de niños en las escuelas y hay muchos asesinatos de profesores y alumnos (Comité de los Derechos del Niño, 2018, p. 11). En 2017, casi la mitad de las escuelas públicas estaban en barrios donde operan las pandillas (Hernández, 2018). 

La discriminación

La discriminación de género es un reto al que se enfrenta El Salvador. La discriminación afecta a los niños y a las niñas de manera diferente. Las niñas están especialmente discriminadas en el acceso a la educación y a los servicios de salud sexual. También se ven más afectadas por la violencia sexual. Los chicos sufren más los estereotipos relacionados con la violencia. Por no hablar de la discriminación general que afecta a los niños indígenas, a los que tienen discapacidades y/o a los de la comunidad LGBTQI2+ (Comité de los Derechos del Niño, 2018, p. 4). 

De hecho, las maras tienen acciones particularmente homofóbicas (Human Rights Watch, s.f.). Con el objetivo de lograr el cambio, El Salvador ha establecido el Sistema Nacional de Promoción de la Igualdad Real y el Plan Nacional de Igualdad (2016-2020) (Consejo de Derechos Humanos, 2020, p. 7).

Explotación sexual

La violencia sexual contra las niñas está aumentando en El Salvador en un clima de total impunidad. Entre enero y agosto de 2017, se cometieron 1.029 delitos sexuales contra niñas de entre 13 y 17 años, incluidas 769 violaciones. Las maras juegan un gran papel en estos actos, incluyendo la idea de que las niñas mayores de 12 años son consideradas «futuras novias» (Comité de los Derechos del Niño, 2018, p. 7). 

No obstante, existen programas de apoyo a las niñas y de lucha contra la violencia sexual, como el proyecto Ciudad Mujer Joven (Comité de los Derechos del Niño, 2018, p. 7). A nivel nacional, el Ministerio de Educación ha puesto en marcha una encuesta nacional sobre la violencia de género y la orientación sexual, junto con la creación de un gabinete ministerial de 2019 a 2024 para aplicar medidas en estos ámbitos (Consejo de Derechos Humanos, 2020, p. 7). Además, uno de los componentes del Plan Nacional de Seguridad aborda la violencia contra los niños (Consejo de Derechos Humanos, 2020, p. 7). 

La pobreza

El Salvador es un país en el que existen grandes desigualdades. Antes de la pandemia pudo observarse una pequeña mejora con una bajada, entre 2012 y 2016, en la tasa de pobreza y de desigualdades. (Comité de los Derechos del Niño, 2018, p. 11).

Sin embargo, con esta crisis sanitaria y sus consecuencias, el Banco Mundial prevé que la tasa de pobreza aumente del 29% al 40% de los hogares, afectando a 600.000 personas. Con casi el 70% de la población activa trabajando bajo la economía sumergida, esto aumentaría las desigualdades de ingresos (Departamento del Tesoro, 2021). Hay que tener en cuenta la gran desigualdad existente entre las zonas urbanas y rurales. (Comité de los Derechos del Niño, 2018, p. 11)

Los hogares con niños están sobrerrepresentados en la pobreza. Sin embargo, la privación económica tiene un fuerte impacto en la realización de los derechos de los niños. Por ejemplo, es una de las causas de los altos niveles de desnutrición infantil, que afecta especialmente a los niños de hogares pobres (Comité de los Derechos del Niño, 2018, p. 11). Hace que los niños trabajen y vivan en la calle. (Comité de los Derechos del Niño, 2018, p. 14). 

Escrito por Juliette Bail

Traducido por Marta Ancín

Revisado por Nieves Carazo

Actualizado por última vez el 26 mayo 2022

Trabajos citados:

Comité des droits de l’enfant. (2017, juin 21). Observation générale no 21 (2017) sur les enfants des rues. Récupéré sur Convention relative aux droits de l’enfant: https://digitallibrary.un.org/record/1304490, consulté le 3 mai, 2022.

CIA. (s.d.). El Salvador. Récupéré sur The world factbook: https://www.cia.gov/the-world-factbook/countries/el-salvador/,  consulté le 3 mai 2022.

Comité des droits de l’enfant. (2007, mars 2). Observation générale n°8 – Le droit de l’enfant à une protection contre les châtiments corporels et les autres formes cruelles ou dégradantes de châtiments. Récupéré sur Nations Unies, consulté le 6 mai, 2022.

Comité des droits de l’enfant. (2018, novembre 29). Observations finales concernant le rapport d’El Salvador valant cinquième et sixième rapports périodiques. Récupéré sur Base de données relative aux organes conventionnels de l’ONU: https://tbinternet.ohchr.org/_layouts/15/treatybodyexternal/Download.aspx?symbolno=CRC%2FC%2FSLV%2FCO%2F5-6&Lang=en, consulté le 3 mai, 2022.

Conseil des droits de l’homme. (2020, janvier 2). Rapport du Groupe de travail sur l’Examen périodique universel – El Salvador. Récupéré  sur Assemblée générale des Nations Unies: https://documents-dds-ny.un.org/doc/UNDOC/GEN/G20/000/16/PDF/G2000016.pdf?OpenElement, consulté le 6 mai 2022.

Direction générale du Trésor. (2019, mai 22). Situation économique et financière du Salvador – Mai 2019. Récupéré sur Direction générale du Trésor: https://www.tresor.economie.gouv.fr/Articles/2019/05/22/situation-economique-et-financiere-du-salvador-mai-2019, consulté le 3 mai 2022.

Direction générale du Trésor. (2021, décembre 15). Salvador : Le gouvernement met en place un plan économique d’envergure pour faire face à la pandémie. Récupéré sur Ministère de l’économie, des finances et de la relance – France: https://www.tresor.economie.gouv.fr/Pays/SV/situation-economique-et-financiere, consulté le 3 mai, 2022.

Hernández, R. (2018, septembre 14). Vivre dans la peur : le sort des enfants déplacés à cause de l’extorsion des gangs en El Salvador. Récupéré sur UNICEF: https://www.unicef.org/fr/recits/vivre-dans-la-peur-le-sort-des-enfants-déplacés-à-cause-de-lextorsion-des-gangs-en-el, consulté le 3 mai 2022.

Human Rights Watch. (2019). El Salvador. Récupéré sur Human Rights Watch: https://www.hrw.org/world-report/2020/country-chapters/el-salvador, consulté le 3 mai, 2022.

Human Rights Watch. (s.d.). El Salavador – events 2019. Récupéré sur Human Rights Watch: https://www.hrw.org/world-report/2020/country-chapters/el-salvador, consulté le 3 mai, 2022.

Human Rights Watch. (s.d.). El Salvador – Events of 2019. Récupéré  sur Human Rights Watch: https://www.hrw.org/world-report/2020/country-chapters/el-salvador, consulté le 3 mai, 2022.


[1]  Este artículo no pretende ser un relato exhaustivo o representativo de los derechos del niño en El Salvador. De hecho, uno de los muchos retos es la escasez de información actual sobre los niños, especialmente la traducida al francés o al inglés. Este artículo se basa en gran medida en fuentes de la ONU que se beneficiarían de la corroboración con recursos de otros organismos.