Comité de los Derechos del Niño: Níger y Benin

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Entre el 24 y el 28 de septiembre, se reunió en el Palacio Wilson el Comité de los Derechos del Niño para velar por el respeto y la correcta aplicación de los derechos de la infancia en el Níger y en Benin.

Estos dos países de África Occidental, que se enfrentan a problemas causados por la pobreza y un crecimiento demográfico explosivo, han presentado ante la asamblea los resultados de los años anteriores, tras lo cual, los expertos del Comité de los Derechos del Niño han planteado los problemas que siguen existiendo hoy en día en dichos países a pesar de los esfuerzos realizados.

 

 

Tras varios intercambios, el Comité de los Derechos del Niño resaltó que, en general, quedan varios retos por solucionar en el Níger. En primer lugar, la ley de este país no contiene una definición clara de qué es un niño.

En segundo lugar, el Comité considera que es urgente proceder a una armonización de la legislación de este país, pues actualmente coexisten en él el Derecho Civil y el Derecho consuetudinario. Debido a esta doble presencia, se generan diversos problemas que son nocivos para los derechos del niño, como, por ejemplo, los matrimonios a temprana edad. Por otra parte, el Comité solicitó que la edad legal de matrimonio se eleve a los 18 años en el caso de las niñas. Además, los expertos del Comité han detectado un problema grave en el registro de nacimientos, puesto que el control del registro de los niños al nacer es poco claro, lo que impide realizar un seguimiento demográfico.

En cuanto a la legislación, el Comité de los Derechos del Niño ha solicitado que se incluya una disposición específica contra el envío de niños a conflictos armados, así como una legislación sobre salud que luche contra determinadas enfermedades, en especial la tuberculosis, y ha avisado de que es imprescindible bajar el índice de mortandad.

Asimismo, se ha recomendado al Níger que preste atención al presupuesto de educación y al problema del turismo sexual (en este sentido un experto les sugirió que entraran en contacto con la ONG ECPAT).

Por último, tuvo lugar un acalorado debate sobre la venta de niños que en el código penal del Níger no está criminalizada como debiera serlo, de acuerdo con el “Protocolo facultativo de la Convención sobre los Derechos del Niño relativo a la venta de niños, la prostitución infantil y la utilización de niños en la pornografía”. En este sentido, el Comité solicita una adaptación del Código penal.

En cuanto a Benin, se han observado los mismos problemas en lo que se refiere a la recogida de datos y al control de la demografía. El Comité se preguntó por qué solo el 50 % de los niños estaban registrados.

 

 

Por otra parte, los expertos lanzaron la voz de alerta contra los «vidomegons», fenómeno típico de Benin, que consiste en enviar a los niños a una familia de acogida para trabajar en la mayoría de los casos como mano de obra barata. Miles de niños son explotados e incluso a veces maltratados en nombre de una tradición local.

El representante de Benin presente en la reunión (el Ministro de Justicia) manifestó, sin embargo, que este fenómeno estaba en regresión gracias a que la enseñanza en Benin es gratuita y que se han creado comedores, entre otras medidas, para permitir que los niños puedan seguir en la escuela y aliviar financieramente a las familias que pudieran sentirse tentadas de enviarlos a trabajar.

Siguiendo con el tema de la explotación infantil, el Comité ha alertado al país sobre los niños mendigos, los niños hechiceros y la cuestión de los niños albinos y su suerte, ya que sus padres los consideran maléficos y a menudo se les sacrifica.

Por último, el Comité se lamenta de que el Código penal de Benin siga sin adoptarse. Además los expertos manifiestan su preocupación por la ausencia de legislación que reprima toda forma de explotación infantil, incluido el trabajo forzado. Por otra parte, el Comité ha planteado el mismo problema que en el caso del Níger, es decir, la incriminación de la venta de niños no se penaliza formalmente y, por lo tanto, necesita una disposición en este sentido.

 

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Escrito por Eddy Malouli

Traducido por Carolina de la Cruz Montserrat