Carreras de camellos con robots jinete : la tecnología pone fin al trabajo infantil

Posted on Posted in Derechos Humanos, Uncategorized
¡La tecnología al servicio de los derechos del niño ! Encuentre aquí el prototipo de jinete propuesto por la empresa suiza K-Team.
¡La tecnología al servicio de los derechos del niño ! Encuentre aquí el prototipo de jinete propuesto por la empresa suiza K-Team.

Desde hace años la tecnología ha permitido sustituir el uso de niños en las carreras de camellos. Hoy en día, en todos los países del Golfo, son pequeños robots humanoides los que montan a los camellos, dejando fuera a los niños de este lucrativo negocio.

La idea llegó de Qatar en el año 2000. En ese momento, las carreras de camellos, deporte nacional en los países del Golfo, estaban en peligro. El uso de los niños jinete era, con toda razón, abiertamente crititcado por los defensores de los derechos del hombre y sobre todo por Unicef. En 2005, Qatar los Emiratos Árabes Unidos prohibieron la contratación de niños jinete. Un paso adelante en el reconocimiento de los derechos del niño, aunque la medida fue cuestionada por los sectores más conservadores. En los países del Golfo las carreras de camellos equivalen al béisbol en Estados Unidos o al cricket en Australia. Son deportes populares fuertemente arraigados y, por tanto, difíciles de abandonar.

En ese contexto el científico e inventor qatarí Rashid Ali Ibrahim tuvo la idea de fabricar pequeños robots para sustituir a los niños. A partir de los prototipos, el artefacto fue perfeccionándose al tiempo que fue simplificando la electrónica. A finales de 2003, Qatar contrató a empresa suiza K-Team para diseñar el robot jinete. Sin embargo los camellos estaban acostumbrados al hombre así que los primeros prototipos los asustaban. La empresa suiza creó entonces un verdadero humanoide con: gafas de sol, sombrero, era incluso capaz de desprendere el perfume árabe que acostumbraban a usas los jinetes.

En 2005 tuvo lugar en Qatar la primera carrera de camellos robots jinete. Fue un éxito a pesar de que los robots suizos fueron reemplazados por máquinas más ligeras y menos costosas.
Hoy en día, un robot jinete es una verdadera joya de la tecnología utilitaria: puede medir la velocidad y el pulso del camello, está provisto de un GPS, de una fusta y retransmite la voz de su propietario. Todas estas ventajas han sabido seducir al cliente. Además el precio oscila entre los 250 y los 350 dólares.

Escrito por: Laurine Jobin
Traducido por: Lidia Dabant
Revisado por : Clara Belda