2019, un año en los derechos del niño

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«Debemos a nuestros niños – los ciudadanos más vulnerables de cualquier sociedad– una vida sin violencia ni miedo».

– Nelson Mandela

Si buscamos en cualquier enciclopedia, probablemente encontremos la misma definición de qué son (o deberían ser) los derechos del niño: los derechos de los niños a disfrutar de salud, educación, vida familiar y un nivel de vida adecuado y a no temer nunca el hambre, los malos tratos, los abusos, el abandono ni ninguna otra situación inhumana (UNICEF, 2011).

Ni siquiera hace falta que terminemos la frase para darnos cuenta de que, por desgracia, en muchos países y en muchas situaciones, esto no es así en la actualidad. Aquellos de nosotros que son los más vulnerables muchas veces son precisamente los más ignorados por quienes deberían protegerles y asegurarse de que disfruten de una verdadera infancia: despreocupada, feliz y segura.

Definición de los derechos del niño

Durante muchos años, los derechos del niño han estado definidos en la legislación mundial y ante los tribunales de forma muy deficiente. Ha sido así a pesar de que está claro que quienes carecen de capacidad para defender esos derechos o defenderse a sí mismos en los ámbitos político, judicial o económico deberían recibir más protección que quienes pueden hacerse oír. Y, aun cuando se oye a esas voces, no basta con hacerlo de vez en cuando, sino que habría que escucharlas cada año y cada día que pasa en el frente de batalla de la defensa de los derechos humanos. ¿Qué ha supuesto 2019 para los derechos del niño?

Si tenemos en cuenta que el verdadero reconocimiento de los intereses y derechos del niño se hizo realidad el 20 de noviembre de 1989 con la adopción de la Convención de los Derechos del Niño, 2019 es, tanto matemática como simbólicamente, un gran año en la celebración de los derechos del niño.

Hace 30 años, esa Convención, como primer texto internacional jurídicamente vinculante, reconocía los derechos fundamentales del niño, que constan de las garantías fundamentales y los derechos humanos esenciales. En aquella importante fecha, se reconocía por fin que un niño es un ser humano, digno de respeto y merecedor de sus derechos y de su dignidad. Debido a su juventud y a su vulnerabilidad, los niños, a diferencia de los adultos, carecen de recursos para protegerse a sí mismos y, en consecuencia, deben ser objeto de un interés particular y de una protección específica (Humanium, n.d.).

Este año, tres décadas después, el significativo aniversario de la Convención ha supuesto sin duda una oportunidad única para poner los derechos del niño en un lugar prioritario de la agenda internacional con voces de niños para representarles. ¿Y quién alzó lo bastante la voz como para defender los derechos de los niños este año?

Voces de niños por los derechos del niño

Una de las voces más emotivas que se alzaron ante las propias Naciones Unidas fue la de Greta Thunberg, una niña de 16 años que interpeló con valentía a los líderes del mundo entero reprochándoles su «traición» a los más pequeños por ser incapaces de afrontar la alarmante crisis climática planetaria.

«Esto no está bien. Yo no debería estar aquí. Debería haber vuelto a la escuela, al otro lado del océano. ¿Vienen a mí en busca de esperanza? ¡¿Cómo se atreven?!»

Greta Thunberg (The Guardian, 2019)

Hay muchos experimentados líderes mundiales y, sin embargo, es una niña de 16 años quien se da cuenta de verdad de que hoy nos enfrentamos a la mayor crisis medioambiental que se pueda imaginar. No solo se da cuenta, sino que nos advierte de su gravedad. Pero somos nosotros quienes debemos escuchar. La contaminación que nos ha llevado a esta crisis climática amenaza sin duda la salud de los niños de todo el mundo y son niños y jóvenes perspicaces como Greta quienes cargan con el peso de los fracasos de nuestros dirigentes (WHO, 2019). Mientras los líderes hacen oídos sordos al problema, ella sigue luchando. En pie frente a ellos con solo 16 años.

¡Feliz cumpleaños, Humanium!

Ya sabemos que el 20 de noviembre es una fecha importante, especialmente este año, porque es el día en que se adoptó por fin la Convención de los Derechos del Niño. Pero lo que muchos quizá no sepan es que, simbólicamente, Humanium se fundó en la fecha de la firma de la Convención hace 11 años, con el objetivo de luchar por el bienestar de los niños en todo el planeta.

En estos 11 años de trabajo, además de brindar asistencia legal a las víctimas de vulneraciones de los derechos del niño, a través de sus proyectos, Humanium ha estado trabajando activamente en la concienciación sobre la difícil situación de los derechos del niño de más de cinco millones de personas cada año y apoyando a sus aliados locales con proyectos para ayudar a niños de todo el mundo.

En la actualidad, tenemos cinco programas en marcha en Ruanda con nuestro socio local AVSI, así como otros programas en la India en colaboración con Hand in Hand India. Todos ellos están destinados a mejorar las vidas de los niños empoderando a sus comunidades locales y ayudando a la gente a encontrar más oportunidades. Solo este año, Humanium hizo dos viajes a Ruanda para llevar a cabo unos alentadores y gratificantes talleres sobre los derechos de los niños en primera persona con 600 niños, cuidadores, vecinos, autoridades locales y estudiantes en varias aldeas.

El equipo de Humanium pasó varios días y muchas horas con jóvenes madres, explicándoles los derechos del niño, haciéndoles sentirse valoradas, escuchadas y poderosas, tanto por sí mismas como por sus hijos. Nos centramos en ayudarles a ser conscientes de toda su capacidad para cumplir sus sueños y aspiraciones dentro de sus comunidades. Al empoderarlas, esperamos empoderar también a sus hijos (al ver a sus madres ser valientes y seguras) para que, en el futuro, cumplan sus propias metas.

Humanium, junto a su aliado AVSI en Ruanda, trabaja incansablemente por la integración de los niños en sus familias, garantizando que se satisfagan sus necesidades básicas humanas y que las necesidades emocionales, por las que luchamos, se cubran con la misma importancia.

Arndt Soret, fundador de Humanium

Al acercase el final del año, está claro que 2019 ha sido un gran año para la materialización de los derechos del niño. Pero –lo que es aún más importante– tenemos muchos años por delante para seguir actuando contra las violaciones de los derechos de los niños, marcar la diferencia y, como Greta, seguir en pie luchando por todos aquellos que son injustamente pisoteados. Especialmente por los más pequeños y vulnerables.

Escrito por Ivana Kaćunko

Traducido por Eva Milla

Bibliografía

  1. Humanium (n.d.). “Rights of the Child: The meaning of the child and the rights of the children”, en https://www.humanium.org/en/child-rights/, consultado el 6 diciembre 2019.
  2. Thunberg, G. (2019, September 23). “If world leaders choose to fail us, my generation will never forgive them”, en <https://www.theguardian.com/commentisfree/2019/sep/23/world-leaders-generation-climate-breakdown-greta-thunberg, consultado el 6 diciembre 2019.
  3. UNICEF (2011). Every Child’s Right to be Heard. A Resource Guide on the UN Committee on the Rights of the Child General Comment No 12, Save the Children UK on behalf of Save the Children and UNICEF, en https://www.unicef.org/french/adolescence/files/Every_Childs_Right_to_be_Heard.pdf, consultado el 6 diciembre 2019.
  4. WHO (2019). “How air pollution is destroying our health”, en https://www.who.int/airpollution/news-and-events/how-air-pollution-is-destroying-our-health, consultado el 6 diciembre 2019.