Niños de Bangladesh

Niños de Bangladesh

Descubriendo los derechos infantiles en Bangladesh

Bangladesh, habiendo ratificado la Convención Internacional de los Derechos de los Niños (CRC) en agosto de 1990, se comprometió a respetar, defender y promover los derechos de los niños en su país. No obstante, a pesar de su promesa, el país afronta serios problemas (servicios ineficientes, políticas inapropiadas, etc.) que están perjudicando actualmente a los niños en su acceso al pleno disfrute de sus derechos.

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redÍndice de Cumplimiento de los Derechos del Niño : 6,03 / 10

Nivel rojo: Situación difícil

Población : 163.6 millones
Pob. 0-14 años : 33 %

Esperanza de vida : 70,7 años
Mortalidad – de 5 años : 31 ‰

Principales problemas que afectan a los niños en Bangladesh:

Pobreza

Más de 60 millones de niños viven en Bangladesh (lo que supone 8 veces el número de niños que vive en Francia), la mitad de los cuales crecen en la pobreza más absoluta.

La pobreza, que afecta a gran parte de la juventud de Bangladesh, es el resultado de una alta tasa de desempleo y tiene severas repercusiones en el acceso de los niños a una dieta saludable, servicios de salud y educación, recursos financieros suficientes  para superar esta pobreza, etc.

El derecho a la salud

Las tasas de desnutrición infantil permanecen en niveles elevados en Bangladesh. Afecta principalmente a las familias pobres que no tienen medios para alimentarse. Además, fenómenos atmosféricos severos (inundaciones, desastres naturales, etc.) han comprometido la seguridad alimenticia de las familias en áreas rurales.

Las enfermedades relacionadas con el agua son serias. De hecho, como el agua potable es escasa y los sistemas de saneamiento son inadecuados, los niños de Bangladesh sufren, a menudo, de diarrea. Además, muchos padres olvidan lavarse las manos, con lo que ayudan a expandir las bacterias.

En relación a las vacunaciones, la gran mayoría de los niños entre 1 y 2 años se havacunado. No obstante, por falta de apoyo de los servicios médicos en regiones remotas del país, hay familias que han dejado de vacunar a sus niños.

Mortalidad infantil

Aunque la tasa de mortalidad de los niños menores de 5 años ha disminuido considerablemente, todavía se mantiene en niveles preocupantes.

Desafortunadamente, las madres no saben adónde acudir cuando necesitan ayuda. De hecho, el país carece de servicios pediátricos y de personal cualificado. Además, la información sobre el parto que se facilita a las jóvenes es casi inexistente. Muy frecuentemente, no saben, por ejemplo, que su bebé necesita mamar inmediatamente o que deben mantenerlo caliente.

Este problema podría solucionarse con facilidad si las autoridades locales desarrollaran servicios de salud y si formaran más personal hospitalario.

El derecho a la identidad

Los padres de Bangladesh raramente informan del nacimiento de sus hijos a las autoridades. Así, sin un certificado o partida de nacimiento, no se respeta el derecho del niño a su identidad. De hecho, no son reconocidos como miembros plenos de la sociedad y no pueden ejercitar sus derechos. En adelante, se convierten en invisibles a los ojos de la comunidad.

Además, los niños no registrados no están protegidos contra el abuso, como el trabajo forzado, la prostitución, el matrimonio infantil, el contrabando y el tráfico ilegal.

Por lo tanto, es esencial que el gobierno de Bangladesh implemente la automatización del sistema de registro de nacimientos y la emisión de certificados de nacimiento.

Abuso

Los niños de Bangladesh, tanto en lugares públicos como privados, así como en sus familias, sufren diferentes formas de violencia y negligencias. En la escuela, por ejemplo, los profesores maltratan a menudo a sus alumnos. La policía también es famosa por el uso de la fuerza, incluso contra delincuentes jóvenes.

Desafortunadamente, el castigo corporal y el trato denigrante son la norma porque están permitidos por la ley y por la sociedad.

Derecho a la educación

En Bangladesh, la educación es gratuita y obligatoria para niños de 6 a 10 años. Sin embargo, los niños trabajadores, los discapacitados, los indígenas, etc., raramente tienen acceso a la educación, ya que, desafortunadamente, su derecho a la educación no es respetado.

Esto también es cierto para los niños de las comunidades más pobres (especialmente los chicos) quienes deben abandonar a menudo su educación para poder ayudar económicamente a su familia.

La calidad de la educación no es muy buena porque un tercio de los profesores enseña sin tener un diploma de estudios. Además, la infraestructura educativa está obsoleta: faltan servicios separados para las chicas, ventilación, iluminación, etc.

Además, el abuso que algunos niños sufren en las escuelas siguen siendo habituales. De hecho, hay estudios que han demostrado que los niños sufren abusos físicos por parte de sus profesores y las chicas son acosadas sexualmente con frecuencia en el colegio o en el camino a la escuela

Matrimonio infantil

Aunque es ilegal, el matrimonio infantil se mantiene como una práctica ampliamente extendida en Bangladesh. De hecho, un tercio de las jóvenes de Bangladesh se casa antes de cumplir los 15 años.

Es habitual que la familia de la novia pague una suma de dinero (dote) a la familia del novio, e incluso a veces se paga a plazos después de la boda. El peligro está en que en caso de impago, la joven corre el riesgo de ser abusada.

Los matrimonios infantiles tienen repercusiones negativas en la salud, el desarrollo y el pleno ejercicio de los derechos de los niños. Casadas a temprana edad, las chicas tienen interacción social limitada porque han abandonado su educación. Además, corren el riego de tener un embarazo temprano, lo que tiene peligrosas consecuencias para su salud y para la del bebé.

Deben implementarse medidas legislativas y campañas informativas para que Bangladesh pueda, por un lado, prohibir estas prácticas dañinas tradicionales y, por otro, informar a las comunidades sobre los peligros que estas costumbres provocan.

Trabajo infantil

Debido a la extrema pobreza en la que viven, las familias se ven forzadas en muchas ocasiones a que sus hijos trabajen. Los empleos más comunes de los jóvenes son la construcción, el reciclado de baterías, el transporte por carretera, la reparación de coches y las tabacaleras.

Sin educación, estos niños crecen en condiciones muy duras: largas jornadas, bajos salarios, no hay comida, etc. Además, se enfrentan a los riesgos de la prostitución, la discriminación, el abuso, etc.

Bangladesh también se enfrenta a la situación de los jóvenes jinetes, ya que se les envía al Oriente Medio donde son empleados en carreras de camellos y, naturalmente, puestos como jinetes. Llevan una dieta muy restringida para que no engorden. Además, a menudo son sujetos a abusos físicos y sexuales.

Trata y tráfico infantil

Los niños de las comunidades pobres de Bangladesh tienen un riesgo elevado de ser vendidos por sus padres, quienes imaginan que la emigración será beneficiosa para ellos, asegurándoles salarios más altos y mejores condiciones de vida. Sin embargo, la realidad no tiene nada que ver con esto: los niños son explotados, especialmente las chicas, en primer lugar en servicio doméstico y posteriormente como prostitutas.

En muchos casos, los niños que están bajo la influencia de los traficantes viven y trabajan en las calles.

Justicia juvenil

En Bangladesh, los delincuentes juveniles a menudo son maltratados cuando están bajo custodia. Además, hay tribunales juveniles, pero en muchas ocasiones los niños son juzgados y sentenciados por tribunales ordinarios. En la misma línea, existen centros de detención para delincuentes juveniles pero normalmente los niños son encarcelados con los adultos.

Las sentencias pueden ser extremadamente duras. De hecho, algunos niños de menos de 15 años han sido sentenciados a cadena perpetua y otros, menores de 18, han recibido sentencias de muerte.

El Comité de Derechos del Niño está muy preocupado con estas sentencias y recomienda que el Estado prohíba la pena de muerte o la cadena perpetua para los jóvenes, que son considerados responsables penalmente a partir de los 12 años, y que la justicia para los menores se imparta en conformidad con la Convención Internacional de los Derechos del Niño.

Libertad de opinión y expresión en el país

En Bangladesh, los niños raramente tienen la posibilidad de expresar sus opiniones y participar en las decisiones que se toman en el hogar, la escuela, etc. Tampoco en los procedimientos legales y administrativos, se escucha a la juventud. No forman parte en las decisiones que les afectan y, por lo tanto, debe mejorarse el proceso de participación en dicho caso.