Niños de Grecia
Descubriendo los derechos infantiles en Grecia
Desde el inicio de la crisis, los griegos, y especialmente los niños, han sufrido un empeoramiento de sus condiciones de vida. Se enfrentan a dificultades cada vez mayores (como el abandono), debido a los crecientes niveles de pobreza. Los niños pertenecientes a minorías étnicas son objeto de discriminación y víctimas del tráfico humano con motivos sexuales o comerciales. Por un país miembro de la Unión Europea, la situación actual de los niños griegos es muy preocupante.
Población : 10.8 millones Esperanza de vida: 80,8 años |
Principales problemas que afectan a los niños en Grecia
Pobreza
La crisis financiera en Grecia está derivando progresivamente en crisis social, con un incremento en los niveles de pobreza del país.
Comparado con otros países de la UE, el número de niños que viven en el nivel de la pobreza es alto. En 2007, el 9,7% de los niños menores de 18 años vivían en familias con ingresos un 40% inferiores que la media nacional.
Lo que es más grave, el 19,7% de los niños viven en familias que no pueden cubrir sus necesidades básicas.
Un estudio de 2008 subrayó el hecho de que la pobreza afectaba principalmente a los hijos de padres desempleados, con falta de educación o pertenecientes en familias numerosas.
En Grecia, la educación pública es gratuita desde la educación primaria hasta la universidad. Es obligatoria entre los 6 y los 15 años.
La existencia de muchas minorías étnicas, significa que existen «escuelas interculturales» para niños pertenecientes a estas minorías, bien por ser inmigrantes o porque proceden de parejas mixtas. El objetivo
de estas escuelas es incrementar la conciencia entre los estudiantes de su propia cultura y valores, con consecuentemente, introducirlos al conjunto de tradiciones presentes en la sociedad griega.
La idea es de facilitar la integración de los niños inmigrantes en el mismo tiempo que se preserva la lengua y la cultura de sus padres. Desafortunadamente, en la vida real, su principal misión parece ser enseñar la lengua y la cultura griegas.
Derecho a la salud
Cualquier persona que viva en Grecia tiene derecho a la atención sanitaria, para està misma ocasión su estatus de residentelo permite muy facilmente.
Sin embargo, el sector sanitario se ha visto especialmente castigado por la crisis. Los pacientes deben pagar una tasa de 5€ por cada visita en hospital. Los médicos suelen pedir a sus pacientes que compren sus propias escayolas, agujas y vendas ya que los hospitales ya no tienen existencias.
Según Médicos del Mundo, la situación está empeorando. Esta organización ha empezado a distribuir productos nutricionales enriquecidos a algunos niños; las familias más vulnerables no pueden hacer frente a la situación. Hay gente que está yendo directamente a las sedes de las ONGs para realizarse revisiones médicas gratis y la situación es cada vez más difícil de manejar.
Según el Centro Helénico de Control y Prevención de Enfermedades (una organización sanitaria financiada por el Ministerio de Sanidad), el número de niños con SIDA es bajo. Sin embargo, se han diagnosticado transmisiones de madre a hijo como consecuencia de deficiencias en el control de las mujeres embarazadas.
Ahora se llevan a cabo tests sistemáticos de SIDA en mujeres embarazadas para prevenir su transmisión de madre a hijo.
Maltrato físico
No hay estadísticas nacionales sobre el abuso infantil en Grecia, principalmente porque las autoridades no están obligadas a informar de los casos.
Sin embargo, la ley griega prohibe la violencia hacia los niños en la escuela y en casa. Aun así, esto no evita que el 60% de los padres griegos inflijan castigos corporalesa sus hijos. A los ojos de la ley, el uso de castigos corporales como un procedimiento disciplinario constituye un abuso de la autoridad paterna y los acusados de ello deben ir a prisión.
Se han puesto en marcha programas de prevención, así como programas para las víctimas de abusopara mejorar la situación.
Abuso sexual
En Grecia, algunos niños también son víctimas de abusos sexuales, lo que puede incluir abusos de su propia familia. Esta situación es especialmente alarmante porque Grecia ha decidido recientemente considerar la pedofilia como una discapacidad.
Trabajo infantil
La constitución griega prohibe de forma general el trabajo infantil. No obstante, la edad laboral mínima es de 15 años, o de 12 si se trabaja en un negocio familiar.
Muchos niños son forzados a trabajar para ayudar a sustentar a sus familias, incluso algunos padres envían a los niños a pedir limosna en las calles. En Grecia, desgraciadamente, estas actividades no son castigables por la ley a pesar de la ratificación griega de la Convención sobre Peores Prácticas de Trabajo Infantil.
El gobierno y muchas ONGs creen que la mayoría de los niños que piden en las calles son rumanos o albanos víctimas del tráfico humano.
Grecia se ha convertido en un país de tránsito, así como un destino para un gran número de inmigrantes, lo que ha llevado a un incremento sustancial de todo tipo de tráfico, como prostitución y pornografía infantil.
Tráfico infantil con fines comerciales
En Grecia, la mayoría niños de la calle han sido objeto de trata. Muchos de ellos provienen de la comunidad gitana o de Albania.
Estos niños no van al colegio y ocupan sus días en las calles, restaurantes y hoteles, pidiendo, robando, limpiando parabrisas o vendiendo baratijas con la esperanza de ganar dinero para los traficantes que los trajeron a Grecia.
Los traficantes se dieron cuenta rápidamente que importar niños era fácil y rentable. Actualmente, el tráfico de niños para fines comerciales ha ido en aumento.
Peor aún, algunos padres venden a sus hijos o los alquilan a los traficantes a cambio de un pago mensual.
Tráfico infantil para la explotación sexual
Muchas jóvenes son víctimas del tráfico à des sexual. Muchas jóvenes son víctimas del tráfico sexual. Recientemente, mujeres inmigrantes ilegales son forzadas a ejercer como prostitutas o son amenazadas de denuncia ante las autoridades para ser deportadas.
Grecia es un polo migratorio por su posición geográfica. Por lo tanto, cada año es testigo de la llegada de muchos nuevos inmigrantes, incluyendo niños que, en su mayor parte, escapan de sus países en busca de una vida mejor.
Menores no acompañados
Un gran número de menores no acompañados, de países como Albania, Bulgaria, Kazakhstan, etc., se encuentran en Grecia.
Niños detenidos
Estos niños son detenidos frecuentemente en condiciones inhumanas. En Grecia, los centros de detención están masificados, las mujeres y los niños se apiñan en las mismas celdas que los hombres. Las condiciones higiénicas son igualmente deplorables, hasta el punto de que ponen en peligro la la salud de los detenidos.
En Diciembre de 2010, 120 menores inmigrantes no acompañados estaban entre los 450 detenidos en el Centro de detención de Fylakio-Kyprinou, según Human Rights Watch. Habían estado semanas, o incluso
meses, en el centro, junto con adultos con los que compartían incluso sus colchones.
Aunque se supone que Grecia protege a los menores, y sólo los detiene como último recurso, demasiados niños son privados de libertad en condiciones horrendas. Esto se produce a pesar de la obligación legal de las autoridades de tratar de forma humana a cualquier persona en suelo griego, independientemente de su status legal.
Como consecuencia de la actual crisis, los casos de niños abandonados se han incrementado mucho en los últimos meses.
Muchos adultos han perdido sus empleos y se han sentido incapaces financieramente de cuidar de sus hijos. Algunos padres los dejan en el colegio y nunca los vienen a recoger; otros, los acompañan a centros originalmente destinados al cuidado de niños maltratadoss.
Actualmente, aproximadamente la mitad de las solicitudes de admisión provienen de padres muy pobres que prefieren renunciar a sus hijos que verlos como indigentes.
Niños pertenecientes a minorías
La población de Grecia tiene numerosas minorías étnicas turcos, rumanos, búlgaros, armenios, albanos y macedonios.
Los niños de las minorías a menudo son objeto de discriminación. En Grecia, los rumanos se enfrentan a una serie de dificultades en relación al empleo, a los servicios públicos, laeducación y el acceso a la vivienda.
Más aún, la comunicación de la información sobre contraceptivos y prácticas saludables suele ser complicada para los niños de las minorías. Los padres de estos niños también tienen problemas con el registro de nacimientos, lo que significa, muchas veces, que muchos niños no cuentan con certificados o partidas de nacimiento.
