Horror en la historia de Canadá: las tumbas indígenas sin identificar

Posted on Posted in Derechos del Niño, Educación, Explotación, Pueblos indígenas, violencia

En mayo de 2021, Canadá se vio sacudida por el hallazgo de un cementerio que había permanecido oculto y en el que yacían más de 200 niños indígenas (Cecco, Michael y Voce, 2021). El cementerio, ubicado en los terrenos de una antigua escuela de Columbia Británica, es un testimonio de la segregación histórica que han sufrido los niños indígenas alejándolos de la sociedad del país y del abuso flagrante de niños a manos de programas aprobados por el Gobierno.

Se han descubierto más de mil tumbas desde entonces, lo que ha provocado que se tomen medidas a nivel nacional en favor de la reconciliación y la restauración de los pilares invaluables de las comunidades indígenas. Las comunidades indígenas aún sufren debido a estas atrocidades, por lo que el proceso de restauración representa enseñanzas de gran valor acerca de la reconciliación.

Nuevas tumbas encontradas

A partir del primer descubrimiento, en el mes de mayo, de 215 tumbas de niños indígenas, se han encontrado más de 1300 tumbas sin nombre en todo Canadá (Cecco, 2020). Los sitios de estos hallazgos pertenecen exclusivamente a antiguas escuelas residenciales financiadas por el Gobierno y muestran un panorama del horroroso pasado colonial del país. El hallazgo más grande, producido en Saskatchewan, reveló 715 tumbas sin identificar, lo que evidencia tanto la magnitud de esta práctica como la probabilidad de que se produzcan nuevos y considerables descubrimientos (BBC News, 2021). 

Es probable que estos lugares hayan existido durante décadas o incluso cientos de años: un descubrimiento reciente de 160 tumbas sin identificar en la escuela industrial de la isla Kuper demostró que el instituto funcionó desde 1890 hasta 1975 (Cecco, 2021). Más allá de estos trágicos descubrimientos, un estudio más profundo sugiere que algunos de los restos ocultos pertenecían a niños de tan solo 3 años (Cecco, Michael y Voce, 2021).

Opresión colonial, represión indígena

La Constitución canadiense reconoce tres grupos de pueblos indígenas: los inuit, los métis y los Primeras Naciones. Estas poblaciones habitan en diferentes zonas geográficas del país: las comunidades Inuit se asientan en el norte, los métis, en las praderas canadienses y los pueblos de las Primeras Naciones —los habitantes originarios del lugar— ocupan los territorios del sur del Ártico (Filice y Parrott, 2020). Primeras Naciones es un término que se utiliza para reunir al grupo indígena más grande e incluye a 64 comunidades que inicialmente habitaron la mayor parte de Canadá (Cecco, Michael y Voce, 2021).

Las poblaciones indígenas fueron sometidas a controles estrictos y afrontaron persecuciones a nivel nacional a partir de la Ley India en 1876. Esta importante disposición forzó a las poblaciones indígenas a vivir en reservas designadas; esto limitaba sus movimientos y obligaba a las familias y los niños a abandonar sus hogares (Cecco, Michael y Voce, 2021). Además, los adultos y los niños por igual eran llevados a instituciones diseñadas para despojarlos de su patrimonio cultural, su lengua, su identidad y sus costumbres (Cecco, Michael y Voce, 2021).

Escuelas residenciales: un plan de estudios destructivo

La primera escuela residencial de Canadá fue el Instituto Mohawk, que abrió sus puertas en 1831 para separar por la fuerza a niños indígenas de sus familias e institucionalizarlos, lejos de sus tradiciones culturales (Centro Nacional para la Verdad y la Reconciliación, 2020). Esta institución era administrada por la Iglesia y recibía fondos del Gobierno, lo que da cuenta del amplio apoyo que recibía a nivel nacional para cumplir con sus objetivos (Centro Nacional para la Verdad y la Reconciliación, 2021). La escuela marcó el comienzo de una era de crueldad que perduró durante 165 años y en la que siete generaciones de niños indígenas fueron separados de sus familias y obligados a asistir a escuelas residenciales (Centro Nacional para la Verdad y la Reconciliación, 2020).

En 1920, una modificación de la Ley India obligó a los niños aborígenes de entre 5 y 7 años a asistir a las escuelas residenciales (Centro Nacional para la Verdad y la Reconciliación, 2021). Más de 150 000 niños fueron enviados a esas instituciones opresivas y diseñadas para despojarlos de su juventud e identidad cultural (Cecco, 2020). En estas escuelas, conocidas por su brutalidad y el claro maltrato que recibían los niños, se les prohibía a estos hablar en su lengua materna y realizar actividades propias de su cultura (BBC News, 2021). 

Las escuelas residenciales solían estar superpobladas, no recibían fondos suficientes y se aceptaba el evidente maltrato infantil sin que los responsables debieran rendir cuentas por sus actos (Centro Nacional para la Verdad y la Reconciliación, 2021). Miles de niños fueron víctimas de abuso físico, sexual y mental por parte de quienes trabajaban en las escuelas y el hecho de que estuvieran alejados de sus familias agravaba la situación. En algunos casos, como sucedió con los niños de la escuela St. Eugene en Columbia Británica, estos debían recorrer más de 1000 km para asistir a estas instituciones (Cecco, Michael y Voce, 2021).

En 2015, La Comisión de la Verdad y la Reconciliación declaró la probabilidad de que sean muchos más de 3200 niños los fallecidos en escuelas residenciales, ya que esta cifra estimada está basada solo en una porción de las escuelas del país que fueron investigadas (Cecco, Michael y Voce, 2021). Es probable que estos niños hayan fallecido a causa de enfermedades, negligencia y suicidio (Cecco, Michael y Voce, 2021).

Derechos indígenas: el camino hacia su recuperación

La Declaración sobre los Derechos de los Pueblos Indígenas, que adoptó la Asamblea General de las Naciones Unidas en 2007, establece los estándares mínimos para la supervivencia, dignidad y bienestar de los pueblos indígenas en todo el mundo (Centro Nacional para la Verdad y la Reconciliación, 2021). Si bien no es jurídicamente vinculante para los mecanismos y marcos institucionales del país, en 2016, Canadá respaldó la declaración y se comprometió a implementarla en su totalidad (Gobierno de Canadá, 2021). 

En 2020, Canadá introdujo una serie de leyes para implementar la declaración, lo que brindó una guía para su puesta en práctica (Gobierno de Canadá, 2021). Entre otras iniciativas, este hecho ha dado lugar a diferentes proyectos para revitalizar y proteger las lenguas indígenas, recuperar y preservar áreas ambientales relacionadas con la cultura indígena, reducir el número niños indígenas bajo tutela estatal y mejorar el acceso a la justicia (Gobierno de Canadá, 2021).

Estos proyectos han recibido un amplio apoyo de la población canadiense. Una vez al año, el 30 de septiembre, en el país se realiza una campaña de concientización nacional sobre los derechos de los pueblos indígenas y los ciudadanos se visten con camisas de color naranja. Este día —proclamado en 2013 y conocido como el “Día de la Camisa Naranja: todos los niños importan”— el pueblo canadiense conmemora, promueve y concientiza acerca de la historia y el legado del sistema de escuelas residenciales y el impacto que ha provocado en la comunidad indígena de Canadá (Universidad de Columbia Británica, 2021).

El Día de la Camisa Naranja está inspirado en la historia de Phyllis Jack Webstad —de la comunidad Stswecem’c Xgat’tem First Nation y exalumna de la escuela residencial de St. Joseph´s en 1973—. La camisa naranja es significativa ya que era una prenda de vestir que usaba Phyllis y que se la quitaron en su primer día en la escuela residencial. Esta prenda se convirtió en el símbolo del progreso continuo por parte de Canadá con el fin de reparar las atrocidades cometidas (Universidad de Columbia Británica, 2021). El Gobierno canadiense ha sabido responder en consecuencia a los pedidos de la Comisión de la Verdad y la Reconciliación al nombrar el 30 de septiembre como el Día Nacional de la Verdad y la Reconciliación (Universidad de Columbia Británica, 2021).

La importancia de la verdad y la reconciliación 

De cara al futuro, la Comisión de la Verdad y la Reconciliación en Canadá continúa trabajando en pos de reparar parte del daño causado por el «genocidio cultural», denominado así por la misma comisión (Centro Nacional para la Verdad y la Reconciliación, 2021). Esta ha realizado 94 llamamientos a la acción, lo que provocó que, en 2019, se destinasen 28 millones de dólares canadienses por parte del gobierno para respaldar e implementar recomendaciones de las autoridades nacionales relacionadas con los fallecimientos ocurridos en las instalaciones de varias escuelas residenciales (Al Jazeera, 2021). Este proceso supone un desafío y el constante descubrimiento de nuevas tumbas de niños genera preguntas acerca de la forma de obtener el ADN de los miembros de cada familia para honrar las tumbas de los niños y sus restos (Cecco, 2020).

Entre otras acciones, la comisión ha ofrecido a las víctimas, tanto directas como indirectas, del sistema de escuelas residenciales la oportunidad de compartir sus experiencias y concientizar sobre cómo las atrocidades pasadas continúan perjudicando a las comunidades actuales (Gobierno de Canadá, 2021). En 2007 se inició el acuerdo de demanda colectiva más grande en la historia de Canadá en un intento de lograr la reconciliación por los crímenes cometidos (Gobierno de Canadá, 2021).

El testimonio de las víctimas de las escuelas residenciales de Canadá es un indicativo de la relación inseparable entre el abuso infantil cometido en el pasado y las experiencias actuales. Las consecuencias del intento de erradicar la cultura indígena por parte de Canadá continúan vigentes en 2021 como lo fueron cien años atrás. Mientras el país se esfuerza por construir puentes, este proceso de reconciliación brinda enseñanzas dignas de ser estudiadas en todo el mundo. 

Humanium, como miembro de Child Rights Connect —la organización que ha colaborado en la elaboración de la Convención sobre los Derechos del Niño de las Naciones Unidas— se compromete firmemente a proteger a los niños en situación de vulnerabilidad de todo el mundo. Humanium trabaja en pos de un mundo en el que se respeten, protejan y cumplan los derechos de los niños en toda circunstancia en la que un niño se vea involucrado. Con su apoyo a Humanium, usted puede concientizar acerca de los problemas que afrontan los niños en el mundo apadrinando a un niño, haciendo una donación, convirtiéndose en socio o voluntario.

Escrito por Vanessa Cezarita Cordeiro

Traducido por Clara Roncoroni

Revisado por Felipe Chavez

Referencias:

Al Jazeera News. (2021, August 10). ”Canada pledges millions to search for residential school graves”. Retrieved from Al Jazeera News, accessed on 9 October 2021. 

BBC News. (2021, June 24). “Canada: 751 unmarked graves found at residential school”, Retrieved from BBC News, accessed on 8 October 2021. 

Cecco, L., Michael, C., & Voce, A. (2021, September 6). “´Cultural genocide´: the shameful history of Canada´s residential schools – mapped”. Retrieved from The Guardian , accessed on 8 October 2021. 

Cecco, L. (2020, July 26). “Those children could be my relatives´: Canada´s first indigenous forensic pathologist on unmarked graves”. Retrieved from The Guardian, accessed on 8 October 2021). 

Cecco, L. (2021, July 13). “Canada: at least 160 more unmarked graves found in British Columbia”. Retrieved from The Guardian, accessed on 9 October 2021. 

Duhamel, K. (2021, September 28). “Unmarked graves are a moment of truth for Canada – Indigenous reconciliation” Retrieved from World Politics Review, accessed on 9 October 2021. 

Filice, M., Parrott, Z. (2020, May 28). “Indigenous peoples in Canada”. Retrieved from The Canadian Encyclopedia, accessed on 9 October 2021. 

Government of Canada. (2021, June 11). “Truth and Reconciliation Commission of Canada . Retrieved from the Government of Canada, Crown-Indigenous Relations and Northern Affairs Canada, accessed on 8 October 2021. 

Government of Canada, “The United Nations Declaration on the Rights of indigenous Peoples”, Retrieved from the Government of Canada, Implementing the United Nations Declaration on the Rights of indigenous Peoples”, accessed on 12 October 2021.

Indigenous Bar Association. (2011). “Understanding and implementing the UN Declaration on the Rights of Indigenous Peoples. An introductory handbook.” Retrieved from the Indigenous Bar Association and University of Manitoba Faculty of Law, accessed on 8 October 2021). 

National Centre for Truth and Reconciliation. (2020). ”Every child matters reconciliation through education”. Retrieved from the National Centre for Truth and Reconciliation and the University of Manitoba,  accessed on 9 October 2021.  

National Centre for Truth and Reconciliation. (n.d). “Residential school history”.  Retrieved from the National Centre for Truth and Reconciliation and the University of Manitoba, accessed on 8 October 2021. 

National Centre for Truth and Reconciliation. (n.d). “United Nations Declaration on the Rights of Indigenous Peoples.”  Retrieved from the National Centre for Truth and Reconciliation and the University of Manitoba, accessed on 9 October 2021. 

University of British Columbia. (n.d). “Every child matters. Orange shirt day national day for truth and reconciliation”. Retrieved from the University of British Columbia and Indian Residential School History and Dialogue Centre, accessed on 9 October 2021.