Niños de República del Congo

Descubriendo los Derechos del Niño en República del Congo

La República del Congo (Congo) puede ser un lugar desafiante para que vivan los niños. A pesar de que el marco legal de los derechos de los niños consiste en herramientas sólidas, a menudo estos no se traducen en la práctica. En particular, la discriminación de los pueblos indígenas, el trabajo infantil y matrimonio infantil pueden limitar el cumplimiento de los derechos de los niños en el Congo.

Índice de los Derechos del Niño6,24 / 10
Nivel rojo:
Situación difícil

Población : 5,2 millones
Pob. de 0 a 14 años : 46.17 %

Esperanza de vida: 63.95 años
Mortalidad en menores de 5 años: 50 ‰

La República del Congo a simple vista

La República del Congo (Congo) – no confundir con la República Democrática del Congo – está escasamente poblada, con más de la mitad de su población concentrada en las dos ciudades más grandes, y casi la mitad de su población menor de 18 años (Banco Mundial, 2019). Los derechos de los niños en el Congo (también conocido como Congo-Brazzaville) están mejorando, con un buen acceso a la educación y muchos mecanismos legales establecidos para proteger los derechos de los niños. Quedan, no obstante, preocupaciones significativas, tales como niños que trabajan, niñas, y niños indígenas que continúan experimentando graves violaciones de derechos y con frecuencia tienen dificultades para satisfacer sus necesidades básicas.

El reciente conflicto entre el estado congoleño y los Ninjas (una milicia local), junto con el “no acceso humanitario” al país y los impactos significativos de la crisis climática provocada por el hombre, tales como las graves inundaciones, se han combinado para crear un contexto muy desafiante para el pueblo congoleño; con los niños particularmente afectados (New Humanitarian, 2018). A pesar de que la proporción de la población viviendo en la pobreza cayó durante la década pasada, la tasa de pobreza extrema ha aumentado desde 2016, especialmente en zonas rurales, como resultado de la bajada de los precios del petróleo (Banco Mundial, 2019).

Históricamente, el Congo estuvo sometido al colonialismo francés durante 80 años y Brazzaville fue la capital del «África ecuatorial francesa». Casi un siglo de brutal colonialismo europeo impactó severamente al país, con innumerables horrores cometidos contra su población y sus recursos despojados para el beneficio francés en forma de construcción de ferrocarriles y extracción de caucho, a pesar de la gran resistencia local. Muchas de las dificultades a las que el Congo y sus gentes se enfrentan hoy están conectadas con los crímenes masivos infligidos durante la etapa colonial.

De hecho, el Congo ha sufrido muchos conflictos desde su independencia en 1960 de la cual aún se está recuperando, incluyendo una guerra civil de 1997-1999 que provocó más de 25,000 muertes y 250,000 personas desplazadas por la fuerza (Naciones Unidas, 1997). Los derechos del niño en el Congo, por tanto, se despliegan en el complejo contexto del poscolonialismo, crisis humanitarias y el orden mundial neoliberal, conflictos internos prolongados y la emergencia climática.

Abordando las necesidades de los niños [1]

El derecho a la salud

El derecho a la salud de los niños en el Congo está asegurado de varias maneras. El Congo ha reducido significativamente el número de niños que mueren antes de su quinto cumpleaños en los últimos años, y el agua potable es accesible a la gran mayoría de la población. Existen tasas de inmunización consistentemente altas en el Congo, aunque algunas de ellas se podrían aumentar todavía más para llegar al límite del 90% de cobertura de vacunación (UNICEF, 2013). Los niños se enfrentan a desafíos concretos a la hora de asegurar el derecho a la salud, siendo la malnutrición un riesgo severo que afecta al 21% de los niños; en particular a los niños indígenas (Banco Mundial, 2019).

El departamento de Pool ha experimento conflictos recientes y se ve especialmente afectado por desafíos en materia de salud, con más del 15% de los niños sufriendo malnutrición aguda (New Humanitarian, 2018), y entre el 17.3 y el 20.4% de niños menores de 5 años desplazados internamente que sufrían malnutrición aguda que huyeron de Pool (Amnistía Internacional, 2019). La tuberculosis y la malaria son enfermedades peligrosas que afectan a una pequeña porción de los niños que viven en el Congo.

El derecho a la educación

El artículo 19 de la Constitución del Congo asegura el derecho a la educación, igualdad de acceso a la educación y formación, y educación universal obligatoria hasta los 10 años (Constitución congoleña, 2015). El Observatorio Congoleño de Derechos Humanos (OCDH) sin embargo, ha declarado que “miles de niños no se pueden beneficiar de esta ley”. Es importante destacar que la educación pública es gratuita. Debido a una falta de financiación estatal, no obstante, algunos colegios son forzados a imponer tarifas, y las familias tienen que pagar por los libros, uniformes, y seguro de salud.

Existen barreras significativas para la educación de niños indígenas que no pueden asistir a la escuela ya que no tienen certificados de nacimiento o no podrían permitirse los 1,200 Francos CFA de África Central al mes de la cuota de seguro (Departamento de Estado EE.UU., 2018). También hay problemas con el nivel de la calidad de la educación pública dado que los colegios públicos congoleños pueden tener recursos escasos y hay disparidades entre las ciudades y el campo.

El OCDH ha destacado estos problemas con el ejemplo de una escuela en Ngonaka, Lékoumu, que tiene unos 296 alumnos por cada 3 profesores (dos de los cuales son temporales). Debido a una falta de financiación pública, el colegio ha impuesto una tarifa de 5000 CFA por año por niño, limitando el acceso a muchos niños. La fuente de agua en el colegio de Ngonaka lleva rota dos años, por lo que los niños no pueden beber agua cuando están en la escuela.  Debido a la distancia de los colegios, algunos niños no van al colegio porque sus padres no tienen los medios. Esto significa que la educación obligatoria para todos los niños hasta los 16 años no puede garantizarse (OCHD, 2019).

El Congo, no obstante, tiene tasas sumamente altas de matriculación con cerca del 100% de los niños asistiendo a la escuela primaria, más del 90% de los niños completando la educación primaria y desigualdades de género insignificantes en este sentido. Las tasas de matriculación en la educación secundaria son mucho menores dado que la educación obligatoria termina a los 16 años.  De ello se deduce que las tasas de alfabetización son relativamente altas, con el 89% entre los hombres y el 84% entre las mujeres (Conseil de Droits de l’Homme, 2018).

El derecho a la identidad

Los niños congoleños adquieren la nacionalidad de sus padres. Los nacimientos dentro del territorio del país no confieren la nacionalidad, a pesar de que existen algunas excepciones para los niños nacidos de padres desaparecidos o apátridas, o niños nacidos de padres extranjeros, cuando al menos uno de ellos también nació en el país. El gobierno no requiere el registro de los nacimientos; es la responsabilidad de los padres pedir el registro del nacimiento para el niño (Departamento de Estado, EE.UU., 2018).

El estado congoleño afirma que casi todos los niños del país tienen su nacimiento registrado, en un alto 96%, indicando que casi todos los niños pueden acceder a su derecho a la identidad en este sentido, al tener sus nacimientos registrados; permitiéndoles existir como ciudadanos y poseer documentación de identidad (Conseil de Droits de l’Homme, 2018). El Comité de los Derechos del Niño, a pesar de esto, reiteró su preocupación en 2018 respecto al “gran número de niños que aún no se registraron, el insuficiente número de oficinas del registro civil en áreas remotas y la insuficiente concienciación de la importancia del registro”.

El Comité urgió al Congo a establecer un sistema de registro de nacimientos más eficiente y accesible para cubrir a todo el país (Conseil de Droits de l’Homme, 2018). Esto es probablemente en parte debido a que la población indígena suele tener problemas a la hora de obtener los certificados de nacimiento necesarios para la matriculación escolar, ya que los centros de registro de nacimientos suelen estar en ciudades alejados de sus hogares. El Congo tiene un plan nacional para la erradicación de la apatridia que protegería a los niños apátridas y ayudaría a asegurar que sus derechos son realizados (Agence d’Information d’Afrique Centrale, 2019).

Niños refugiados

El Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) trabaja con las autoridades hacia la mejora de la situación de los niños refugiados, que suelen ser de origen ruandés, beninés o congolés (RDC). Ahora es posible para cada vez más niños refugiados asistir a colegios congoleños. Los niños en el Congo han experimentado un aumento en los desplazamientos forzosos, con algunos convirtiéndose en desplazados internamente y otros siendo forzados a abandonar el país. Igualmente, muchos niños emigraron desde países vecinos debido a los desplazamientos.

Por ejemplo, al cierre de 2019, las fuertes lluvias e inundaciones afectaron a más de 40,000 personas por el río Ubangi, dañando cultivos y destruyendo reservas de alimentos, ganado e inundando instalaciones de salud, residencias y colegios en comunidades que ya tenían necesidades humanitarias significativas (EE. UU. AID, 2019). El 16 de diciembre de 2018, los distritos de Makotipoko y Bouemba recibieron al menos 10,000 solicitantes de asilo que huyeron de la RDC.

Factores de riesgo → Desafíos concretos del país

Derechos de los niños indígenas

Los pueblos indígenas del Congo son cazadores-recolectores nómadas o seminómadas que viven en la selva por tradición, aunque ahora algunos de ellos se han asentado y trabajan en la agricultura. Los pueblos indígenas de África Central son conocidos de manera colectiva como “Pygmies”; un término que llegó a ser peyorativo, y ha sido reclamado por algunos pueblos indígenas (Survival International, 2020). Los pueblos indígenas han sido vistos como inferiores históricamente por los colonizadores y por las tribus Bantú, conduciendo a una discriminación sistemática y a una esclavitud moderna de los pueblos indígenas que a veces son esclavizados, tratándoles como posesiones (Agence France-Presse, 2011).

Los pueblos indígenas congoleños son «pueblos de los bosques» que consisten en al menos ocho grupos o etnias diferentes, y son muy distintos del pueblo bantú congoleño. En el Congo se hablan más de 60 lenguas. Se estima que los pueblos indígenas comprenden hasta el 10% de la población del Congo (IWGIA, 2011). La introducción en 2011 de la “Ley para la Promoción y Protección del Derecho de los Pueblos Indígenas de la República del Congo” hizo al Congo el primer país africano en introducir una legislación específica para la protección de los pueblos indígenas, y el artículo 22 de una ley nacional legisla en materia de discriminación contra los pueblos indígenas respecto al acceso a servicios de salud, aunque apenas es aplicada. Los niños indígenas están sometidos a barreras particularmente significativas que les impiden acceder a sus derechos.

Por ejemplo, el 65% de los niños indígenas no tienen acceso a la educación, el 40% tienen malnutrición crónica y la mayoría de las madres indígenas dan a luz sin ninguna ayuda de un profesional médico. Dado que estos niños suelen vivir en lo profundo de los bosques, su acceso a servicios de salud y educación culturalmente sensibles está severamente restringido (Cultural Survival, 2018).

Los derechos de los niños indígenas a un medio ambiente seguro y saludable están particularmente amenazados debido a la emergencia climática y a la explotación comercial de espacios naturales, lo que reduce su acceso a alimentos saludables y plantas con un uso medicinal tradicional. Los niños indígenas que asisten a la escuela se enfrentan a dificultades que incluyen barreras lingüísticas, discriminación y falta de currículos culturalmente relevantes. Muchas barreras a su educación, por tanto, conducen a un mayor analfabetismo, oportunidades de empleo limitadas y a un trato injusto en el lugar de trabajo (Cultural Survival, 2018).

Trabajo infantil

En el Congo, el trabajo infantil está prohibido por una ley nacional, con la edad mínima establecida en los 16 años. Hay leyes y políticas sustanciales diseñadas para proteger a los niños de la explotación. A pesar de ello, el trabajo infantil informal continúa siendo un problema. Los niños indígenas y aquellos en áreas rurales se ven particularmente afectados por el trabajo infantil, y niños de tan corta edad como 6 años a menudo trabajan varias horas en los campos cosechando yuca y transportando cargas pesadas de leña.

Los niños nacidos en el extranjero son más vulnerables al trabajo infantil en el Congo, y a veces viajan al Congo para poder trabajar realizando tareas domésticas, en mercados, en la agricultura y la pesca (Departamento de Estado, EE.UU., 2018). Estos niños a menudo envían sus ganancias a sus familias en su país de origen. ONGs locales han informado de que las víctimas de trabajo infantil son tratadas con dureza, trabajan muchas horas, y apenas tienes acceso a servicios de salud o educativos, en una grave violación de sus derechos. Los niños que trabajan en el Congo suelen recibir muy poca o ninguna paga (Departamento de estado, EE.UU., 2018).

No hay estadísticas oficiales del gobierno respecto al trabajo infantil en general, y parece ser que los niños que trabajan suelen estar “fuera del radar” o “fuera de la red”, incrementando así su vulnerabilidad. Una autoridad local informó de que a pesar de que el trabajo infantil informal es ilegal, suele estar culturalmente aceptado (Departamento de Estado, EE.UU., 2018). Hay poca información disponible en cuanto a si el trabajo infantil es un problema en las cadenas de suministro para el sector privado para compañías como Coca Cola, Chevron, Apple, Microsoft y Google, así como para proyectos de deforestación que producen aceite de palma, todos los cuales están presentes en la región y en la vecina RDC, donde se ha informado que este trabajo infantil es un problema enorme, muy peligroso y escandaloso.

De hecho, tal y como el Banco Mundial lo pone, Congo: “está entre los 10 mayores productores de petróleo de África y tiene recursos minerales sustanciales, la mayoría de los cuales aún están sin explotar” (Banco Mundial, 2019). Se necesita más información sobre el trabajo infantil en las cadenas de suministro para el sector privado en el Congo. Parece que el trabajo infantil afecta a una gran proporción de los niños congoleños; de acuerdo con UNICEF, el 23% de los niños congoleños estaban involucrados en el trabajo infantil entre 2009 – 2015 (UNICEF, 2020) y la Organización Internacional del Trabajo encuestó que alrededor del 85% de los niños en las regiones rurales e indígenas trabajan por salarios muy bajos (Cultural Survival, 2019), lo que indica que el trabajo infantil sigue siendo un problema grave y una amenaza para los derechos de los niños.

Matrimonio infantil y derechos de las niñas

El matrimonio infantil es ilegal en el Congo, siendo la edad mínima para contraer matrimonio 18 años para las mujeres y 21 para los hombres, y la edad mínima para el consentimiento sexual establecida en los 18 años. El matrimonio infantil es, sin embargo, permisible legalmente bajo ciertas circunstancias: si ambos progenitores y un juez dan su permiso, es posible que el niño se case sin edad mínima (Departamento de Estado, EE.UU., 2018).

El matrimonio forzado de niños está penalizado en el Congo, con grandes multas y sentencia de prisión. Igualmente, la violación de las leyes de protección de los niños. Del mismo modo, la violación de las leyes de protección infantil que estipulan la trata de niños, la pornografía infantil, el abandono de niños, y el abuso infantil pueden generar graves sanciones penales (Departamento de Estado de EE. UU., 2018). Las estadísticas de 2015 muestran que a la edad de 15 años, el 6% de los niños estaban casados, y a la edad de 18 años, el 33% de los niños estaban casados en el Congo, lo que sugiere que el matrimonio infantil sigue siendo un problema grave en el país a pesar de los mecanismos legales orientados a prevenir esto, y el matrimonio infantil es una barrera para los derechos de los niños congoleños (UNICEF, 2020).

No hay indicios que sugieran que la mutilación genital femenina (MGF) sea frecuente o se practique comúnmente en el Congo, aunque los datos sobre esto están en su mayoría ausentes. La violencia contra las mujeres, desafortunadamente, se dice que es una parte «invisible» del conflicto y de la crisis humanitaria en curso en el Congo (New Humanitarian, 2018).

Escrito por Josie Thum

Traducido por Alba Montes Reguero

Última actualización el 8 de mayo de 2020

Referencias:

AMNESTY INTERNATIONAL (2018) Congo 2017/2018.

OHCHR (2020) Congo in OHCHR Online.

UNICEF (2020) ‘Republic of Congo’ in Humanitarian Action for Children.

UNICEF (2020) ‘Statistics’ in Congo at a glance.

GARDA (2017) ‘Humanitarian crisis declared in Pool department’ in News Alerts.

US AID (2019) Republic of Congo.

KLEINFELD, PHILIP (2018) ‘UPDATED: Congo-Brazzaville’s Hidden War’ in The New Humanitarian.

Africa.com (2019) ‘All about Congo Brazzaville’ in Countries.

CULTURAL SURVIVAL (2018) ‘Observations on the State of Indigenous Human Rights in Congo Prepared for the 31st Session of the United Nations Human Rights Council’ in Cultural Survival Online.

CONSEIL DE DROITS DE L’HOMME (2018) ‘Rapport national présenté conformément au paragraphe 5 de l’annexe à la résolution 16/21 du Conseil des droits de l’homme’ in UPR Info.

OCDH (2019) ‘Droits de l’Homme au Congo-Brazzaville : La terreur et la répression permanentes conjuguées avec la manipulation de l’opinion publique internationale par les gouvernants’ in Rapport Annuel 2019.

WHO (2020) Congo in WHO Online.

US STATE DEPARTMENT (2018) 2018 Country Reports on Human Rights Practices: Republic of the Congo.

WORLD BANK (2019) ‘Overview’, The Republic of Congo.

Congo (Republic of the)’s Constitution of 2015 (2015).

UNHCR (2019) August 2019 Fact Sheet Republic of Congo.

AGENGE D’INFORMATION D’AFRIQUE CENTRALE (2019) ‘Eradication de l’apatridie: validation sous peu du plan national 2019-2024’ in ADIAC En Ligne.

AGENCE FRANCE_PRESSE (2011) ‘Pygmies in the Congo treated like «pets»: report’, Public Radio International.

IWGIA (2011) ‘Republic of Congo’ in IWGIA Online.

Survival International (2020) ‘The Pygmies’ in Survival Online.

Reuters (2017) Congo Republic signs peace accord with «Ninja» rebels.

United Nations (1997) ‘Background Brief on Congo-Brazzaville’, IRIN Department of Humanitarian Affairs.


[1] Este artículo no trata por ningún medio de dar una cuenta completa o representativa de los derechos de los niños en el Congo; de hecho, uno de los múltiples desafíos es la escasa información actualizada sobre los niños congoleses, alguna de la cual es poco fiable, obsoleta o no representativa. Esto es en parte debido a que el Congo es “inaccesible”, a menudo pasado por alto y eclipsado por su vecino mucho más grande, la República Democrática del Congo (RDC).